Yodica: ¿qué es el compuesto creador por la UNAM que previene enfermedades?

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) desarrolló un preparado farmacéutico llamado Yodica, el cual es efectivo como antioxidante y en la prevención y tratamiento de diversas patologías, según dio a conocer la máxima casa de estudios de la nación en un comunicado.

De acuerdo con la UNAM, Yodica contribuye al funcionamiento óptimo de órganos captadores de yodo, como la tiroides, próstata, mamas, páncreas, ovarios y los sistemas inmune y nervioso. Además de ser útil en la prevención de enfermedades como el síndrome metabólico y la diabetes.

También se ha mostrado como un efectivo adyuvante en el tratamiento de patologías benignas, como la hiperplasia prostática, fibrosis mamaria y ovarios poliquísticos, así como en casos de diversos tipos de cáncer como de mama y páncreas.

¿Qué es Yodica?

Yodica es una formulación química natural cuyo principio activo es el yodo molecular, presente de forma natural exclusivamente en algas marinas frescas del género Laminaria, las cuales poseen 30 mil veces más yodo que cualquier otro ser vivo.

El yodo en su forma química como yodo molecular, presenta propiedades antioxidantes y previene el crecimiento anormal de diferentes epitelios y células cancerígenas, y fue desarrollado por el grupo de investigación dirigido por la doctora Carmen Yolanda Aceves Velasco, quienes estudian y elaboran este compuesto en el Instituto de Neurobiología, campus Juriquilla, Querétaro.

En poblaciones de Asia, las algas marinas son parte fundamental de su dieta. Su consumo cotidianamente como condimento, de manera similar a como se consume el chile en México ha sido considerado como uno de los componentes responsables de la menor incidencia de patologías mamarias y prostáticas en estas poblaciones.

Los efectos protectores se sustentan en estudios epidemiológicos los cuales muestran que cuando algunos asiáticos migran a Occidente y cambian de dieta, las siguientes generaciones desarrollan patologías mamarias y prostáticas, evidenciando la importancia del consumo de algas en la prevención de estas enfermedades.


Derivado de los resultados obtenidos en los experimentos en 2005 con yodo molecular en modelos de ratas con cáncer de mama y de próstata, los cuales demostraron que el yodo tenía efectos antiproliferativos y preventivos, la UNAM obtuvo dos patentes, y actualmente, Yodica se encuentra en proceso de registro ante la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris).

Según los expertos, Yodica aporta la cantidad suficiente de yodo en sus diversas formas químicas y es de fácil manejo e ingestión. Se toma en gotas y a la dosis recomendada, sin efectos secundarios, aunque sólo el 1% de la población mundial puede ser intolerante al yodo.

No obstante, se recomienda tomar Yodica de forma moderada, ya que en exceso puede generar alteraciones tiroideas. La dosis varía según la edad, el padecimiento y las condiciones de salud de cada persona.

El frasco tiene un costo de 200 pesos y se puede adquirir directamente en el Instituto de Neurobiología, aunque también puede enviarse a cualquier parte del país vía mensajería.

Para más información, visite la página web: https://www.yodica.org/. Si desea realizar un pedido de Yodica o ajustar su dosis, puede contactar a través del correo electrónico: yodica@inb.unam.mx

Beneficios y resultados de Yodica


En casos de cáncer de mama


Según los investigadores, cuando el yodo molecular entra en la célula cancerosa, se combina con el ácido araquidónico y genera un lípido yodado. Este proceso induce la diferenciación de la célula y reduce su proliferación.

Sin embargo, según Aceves, “no mata totalmente a todas las células cancerosas”, por lo que el yodo molecular no es un anticancerígeno, pero puede actuar como un adyuvante para que la quimioterapia funcione mejor, evitando la resistencia al tratamiento y atenuando los efectos secundarios adversos en las células normales.

En 2019, se publicaron los resultados de un protocolo clínico realizado en mujeres con cáncer de mama que eran pacientes del Hospital General de Querétaro. El tratamiento de quimioterapia más el yodo mostró una mayor reducción en los tumores y los pacientes reportaron menores efectos secundarios.

Después de la operación del tumor, todas las mujeres siguieron tomando yodo molecular y su seguimiento médico mostró que el porcentaje de mujeres sin recaídas o reincidencias incrementó del 63% al 95% en los primeros cinco años.
 

En casos de hiperplasia prostática


En los casos de hombres con hiperplasia prostática, realizado en el Hospital General de Querétaro, aunque aún no ha concluido, se ha observado que el yodo molecular administrado en pacientes con pocos síntomas o ya bajo tratamiento farmacológico detiene el crecimiento anormal de la próstata, permitiendo que la hiperplasia no progrese y atenuando significativamente los síntomas.

Cánceres pancreáticos


La inflamación constante del páncreas no sólo precede al síndrome metabólico y a la diabetes, sino que también puede dar lugar al desarrollo de cáncer y los cánceres pancreáticos son los más letales. Sin embargo, el yodo molecular es captado por órganos asociados a padecimientos metabólicos como el páncreas, hígado y tejido adiposo, por lo que Yodica tiene efectos antioxidantes y antiinflamatorios.

Otros beneficios en curso de investigación


Actualmente, la académica y su grupo están simulando en ratas la mala alimentación humana, incluyendo alimentos altos en grasas y azúcares, y suministrando suplementos de yodo molecular. Según resultados preliminares, aunque las ratas no dejan de consumir estos alimentos, lo hacen en menor proporción y suben menos de peso. Aunque aún no se tienen resultados definitivos, se cree que una dieta fortificada con yodo molecular retardaría los efectos nocivos de consumir alimentos azucarados y altos en grasas.

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